Los costes del transporte marítimo siguen sin dar tregua a las empresas cuyas cadenas de suministro y exportaciones dependen de los barcos.
La reactivación del comercio mundial tras la pandemia provocó una sobredemanda que inició un alza desbocada de los precios que ha llevado a un encarecimiento del coste del transporte marítimo de hasta un 300% . Una escalada que además se está viendo agravada por los cuellos de botella en un sistema marítimo internacional al límite de su capacidad.
Si el pasado mes de marzo fue el bloqueo del Canal de Suez durante casi siete días lo que volvió a poner el punto de mira en los fletes, ahora han sido los problemas en el puerto chino de Yantian lo que está poniendo en jaque a importadores y exportadores. A finales de mayo las autoridades chinas detectaron un brote de Covid y decidieron implantar cuarentenas y controles que han hecho que los muelles del gigante portuario operasen a menos del 30% de su capacidad. Un nuevo atasco que ha vuelto a tener un impacto directo en los fletes marítimos, que se han duplicado.
LOS TRANSITARIOS HEMOS TENIDO QUE DUPLICAR NUESTRO TRABAJO: DEBEMOS ENCONTRAR ESPACIOS EN LOS BUQUES Y HACERLO A UN PRECIO RAZONABLE.